La música romántica es un género musical que se destaca por su temática lírica y melódica, centrada en el amor, el romanticismo y las emociones. Este género abarca una amplia variedad de estilos, como la balada romántica, el bolero y la canción melódica, entre otros.
La música romántica se popularizó en la década de 1950 y experimentó un auge en la década de 1970 gracias a la popularidad de artistas como Julio Iglesias, José José, Roberto Carlos y Camilo Sesto, entre otros. A lo largo de los años, este género ha evolucionado y se ha adaptado a diferentes épocas y culturas, manteniendo siempre su esencia romántica y emotiva.
En la actualidad, la música romántica sigue siendo muy apreciada en todo el mundo, y continúa siendo una forma de expresión para aquellos que desean compartir y celebrar sus sentimientos de amor y pasión.
El comienzo de esta historia ha sido relatada muchas veces. La del niño que apenas con tres años de edad, es motivado a subir al escenario a cantar a lado de su padre, un respetable artista. El niño había ensayado su parte, la sabía muy bien, pero al encontrarse ante una audiencia inmensa de miles de personas, resultó para él una experiencia aterradora y por más de una década nunca volvió a cantar en público de nuevo.
En 1992, Alejandro Fernández hace su debut con un álbum que llevó su nombre como título, iniciando así una de las carreras más exitosas, prolíficas y memorables de la música Latina. Desde ese momento el hijo del legendario cantante de música ranchera Vicente Fernández ha hecho lo que pocos progenitores de padres famosos han sido capaces de hacer: Ha seguido los pasos de su padre pero al mismo tiempo ha hecho su propio camino, con 13 discos y vendiendo más de 12 millones de copias hasta el momento, gracias a su magnifica y aterciopelada voz además de su fuerte presencia escénica. Con el miedo escénico en el olvido, Alejandro incursionó en el cine recientemente, personificando al héroe mexicano Zapata en el aclamado filme dirigído por el afamado director Alfonso Arau, ganador de un premio Oscar (“Como Agua para Chocolate”).
Mientras que otros hablan de hacer el “crossover” del español al inglés, Alejandro es uno de los pocos artistas que se han convertido en una superestrella haciendo una transición del mundo de la música ranchera al mundo de la música pop. Esta dualidad comenzó en 1997 con “Me Estoy Enamorando”, una colaboración con el productor Emilio Estefan, que vendió 3 millones de copias alrededor del mundo, consolidándolo como una estrella internacional. Ahora un nuevo capitulo está por escribirse en la historia de Alejandro con el lanzamiento de A Corazón Abierto, su tercera incursión al pop [el segundo fue “Entre Tus Brazos” en 1999], siendo este el álbum mas personal de su carrera.
Engáñame, olvídame
Que le importa al corazón!
Si mi Amor está firmado
Para ti sin condición
Castígame y miénteme
Te confieso, me da igual
Hace tiempo ha decidido
Mi corazón a quien Amar
No importan tus amores
No importa tu pasado
Tus pequeños errores
Ya los he perdonado
Mucho antes de pecar!
Y no hay nada que hacer
Yo nací para Amarte!
Y Amarte sin final
Algún día, lo sé
El caudal desbordado
De tus aguas llega al mar
Nada va a detener
El impulso de Amar
Que me dicta el corazón!
Yo nací para Amarte
Yo nací para Amarte
Más allá de la razón!!
Después, al fin aprenderás
A aceptar mi corazón
Si el Amor es verdadero
No sé rinde ante el dolor
Te esperaré
No importa cuanto
Me hieras sin piedad
El destino está marcado
Serás mía y nada más!
Y no hay nada que hacer
Yo nací para Amarte
Y Amarte sin final!
Algún día, lo sé
El caudal desbordado
De tus aguas llega al mar!
Nada va a detener
El impulso de Amar
Que me dicta el corazón
Yo nací para Amarte!
Yo nací para Amarte
Más allá de la razón!